La consciencia en los sueños y el plano astral ! 2ª parte

Traducción del Catalán al Español publicado en audio en el bloc “Teosofía Rama Armonía” 31/3/2014

Hace muchos años que psicólogos de renombre, que la mayoría de nosotros conocemos, empezaron a indagar sobre la vida de sueños y a darse cuenta de que los seres humanos tenemos una vida subjetiva real. Sin embargo, hoy en día la gran mayoría todavía los interpretan desde una perspectiva muy personal, sin tener en cuenta que cada ser humano posee su propio nivel de consciencia, y que la interpretación de un sueño puede distar en mucho entre dos personas que hayan tenido un sueño muy parecido. Los psicólogos/as saben por propia experiencia o porque lo presienten intuitivamente, que existen otras dimensiones a donde se puede acceder mientras se duerme, sin embargo, fallan en su interpretación. Esto es debido a qué., al igual que ocurre con los astrólogos/as, tan solo podrán interpretar correctamente una carta astral o un sueño, si están en el mismo nivel de consciencia de la persona que lo solicita o, a un nivel superior. Con esto quiero dar a entender que aunque el psicólogo sea inteligente y tenga mucha experiencia en su trabajo, si todavía no ha alcanzado el nivel de aspirante espiritual, (lo cual significa que todavía no ha entrado en el Sendero de Retorno) la interpretación de los sueños será personal, lo cual significa que no podrá interpretar correctamente el sueño de un aspirante al discipulado que ya ha conectado con su Alma. Ya no digo de un discípulo, porque los sueños y vivencias que experimente se las interpretará él mismo.
A medida que vayan surgiendo psicólogos esotéricos que conozcan como influyen las energías en la consciencia, descubrirán que cada ser humano es único en sus sueños, por lo tanto, la interpretación del problema deberá ser enfocados desde una perspectiva distinta. Un psicólogo avanzado espiritualmente sabrá, nada más hablar con su paciente, si su consciencia es de índole astral o mental. De esta forma podrá acercarse más fácilmente a la causa del problema y no a sus efectos.
El día que los psicólogos en sus interpretaciones profundicen en el mundo de las causas, se darán cuenta de que sus pacientes son almas y de la diferencia evolutiva que existe entre quienes poseen continuidad de consciencia y quienes todavía no la han logrado. La revelación de la continuidad de consciencia en otros planos de existencia hará desaparecer el miedo a la muerte, entonces se reconocerá que la vida y la entidad humana, como tal, continua en otras dimensiones más allá del plano físico. Tal como hemos comentado en otras ocasiones, el proceso de dormirse y de morir son casi idénticos, la diferencia estriba en que al dormir tan solo se separa el hilo de la consciencia, mientras que al morir son cortados los dos hilos que estaban unidos al cuerpo físico, el de la vida y el de la consciencia. Dejando al margen, la recapitulación que debemos hacer de lo vivido en este plano durante el proceso de morir físicamente. Sin embargo, el hecho de desplazarse de un plano a otro es casi idéntico al que realizamos cada noche al dormirnos.
La evolución humana consiste en llegar a ser plenamente conscientes en cada uno de los sub planos de cada plano. Cada vez que damos un paso hacia adelante y hacia arriba desarrollamos un nuevo sentido y esto se trasluce en los sueños, ya que estos nos revelan una nueva y más elevada dimensión. La consciencia del sueño o recuerdo, es retenida, y exteriorizada por medio del cerebro etérico y de este al físico denso que lo interpreta y por ende se ve afectada la personalidad, aunque el verdadero ser consciente es el Alma, la que a su debido tiempo utilizará los cuerpos de materia cuando los haya redimido e iluminado, hasta alcanzar el propósito inicial de convertirnos en seres libres, .. Libres de movernos en todas las dimensiones permitidas al ser humano y ser conscientes en cada plano de una pequeña parte de los Estados de Consciencia del Logos. Para la humanidad común el proceso de llegar a Ser es muy lento, debido a la inercia de tantos millones de años inmersos en la ignorancia de Quienes somos verdaderamente, aunque llegados a cierta etapa avanzada del discipulado, la evolución se acelera grandemente y el discípulo se convierte en el Ser. Entonces deja de soñar y todo cuanto vive despierto o dormido son realidades.
En todo este proceso del desarrollo de los sentidos, el alma va penetrando en cada uno de los sub planos de cada plano a medida que avanza, adquiriendo una mayor consciencia tanto si está despierto como dormido.
Aunque en las enseñanzas esotéricas se enseña que la consciencia astral es un espejismo, dándonos a entender que no es real, sin embargo, el plano más irreal de todos es el físico denso. Sin embargo, esta es la realidad para la gran mayoría de seres humanos que viven en la ignorancia de que existe un estado de consciencia que está más allá del tiempo y por el cual nos regimos en los planos de la materia.
Cuanto más ligera y sutil es la substancia de que está constituido un plano, tanto más real es lo que podamos experimentar. El paso que va de una dimensión a otra lo damos en cada una de las iniciaciones que recibimos.

Cuando reflexionamos sobre los distintos cuerpos, o vehículos, con que nos desplazamos de un plano a otro, los imaginamos lejos de nosotros; sin embargo, están tan cerca e inter penetrados que si los viéramos no sabríamos diferenciarlos al estar sumergidos en ellos. Los cuerpos que poseemos están compuestos por distintas graduaciones de éter y su vibración de rayo y color pueden diferir visiblemente el uno del otro, sin embargo, todos ellos nos envuelven y compenetran. Aunque, como ya hemos comentado en otra ocasión, algunos de ellos tan solo son cúmulos de energía sin forma suspendidos por encima de la cabeza, esperando a que la consciencia humana crezca y puedan ser construidos por los devas constructores de dicho plano, pudiendo ser vistos por el clarividente formando las distintas capas del aura de las envolturas.
En las Aulas internas de la Jerarquía se entrena a los discípulos para que conozcan cada uno de los planos y aprendan a moverse en ellos a fin de que conozcan a las entidades que los habitan, sean o no humanas y si es conveniente o no relacionarse con ellas. También se enseña a reconocer a las almas que están en proceso de reencarnar, esperando que los Señores del Karma y el Ángel solar decidan el momento oportuno. Otras que están en vías de ascender al plano superior mental, así como también se enseña a reconocer a las que igual que nosotros estamos soñando. En cada plano nuestros vehículos poseen la dimensión del plano al que hemos accedido, así que.., cuando nos adentramos en el plano astral, poseemos cuatro dimensiones, al igual que todo cuanto existe en su interior, igualmente ocurre en los planos superiores en que las dimensiones aumentan y lo que para nosotros es el cuerpo físico, a medida que ascendemos se va transformando hasta convertirse en pura Energía, lo que en realidad Somos.
De este modo, el reconocimiento y la sensibilidad aumentan en cada plano que ascendemos y las limitaciones de los planos inferiores van quedando relegadas al pasado a medida que la continuidad de consciencia rompe las separaciones que la mente humana había creado.

Cuando nos despertamos del sueño por las mañanas, es señal de que el cuerpo etérico ha regresado y se ha asentado nuevamente en el físico denso, entonces podemos decir que hemos recuperado la consciencia.
Es muy importante conocer bien la función del cuerpo etérico en lo referente a la salud. Estar bien informados de como actúa cuando entra y sale del cuerpo físico nos puede orientar en las causas que generan ciertos síntomas referentes a alguna indisposición o enfermedad. Por ejemplo, en el caso de sufrir un desmayo, es señal de que el aferramiento del cuerpo físico con el etérico es muy débil y falto de energía. Siendo así es muy fácil su desprendimiento instantáneo, pudiendo separarse también el hilo de la vida si el caso es extremo.
Seguramente la mayoría de nosotros alguna vez nos habremos levantado de la cama medio dormidos inmediatamente en el momento de despertar. Lo más seguro es que demos tumbos o nos ruede la cabeza y esto es señal de que no hemos dado el tiempo suficiente al cuerpo etérico de amoldarse al físico denso.
En el caso de despertarnos con un sobresalto, el etérico vuelve instantáneamente al cuerpo físico, porque para él, es señal de alarma.

Si entra por la cabeza, incluso puede verse mentalmente como una descarga eléctrica, al igual que un relámpago, pudiendo afectar al corazón, produciendo momentáneamente una taquicardia o descampas cardíaco.
Si el despertar es normal y estamos acostumbrados a soñar, el cerebro habrá retenido los sueños vividos. Acostumbra a suceder que cuando el sueño es muy extenso tan solo recordamos una fracción y nos olvidamos de los detalles, pero es posible que esta fracción sea precisamente el mensaje que necesitamos para darnos cuenta de algo, de lo cual, no somos conscientes o nos resistimos a aceptar. Muchos de los sueños nos traen algún mensaje, un consejo, una respuesta o una orientación. También ocurre que en el momento de despertar, recordemos que hemos soñado, sin embargo, se nos borra en un instante.
Las experiencias en el plano astral e incidentalmente en el mental, pueden ser muy diversas, tal como ya sabemos, depende del estado anímico y de la consciencia adquirida por el alma encarnada.
Cuando estamos preocupados generalmente los sueños se entremezclan y durante cierto tiempo incluso podemos tener pesadillas. Estos sueños no deberían tenerse en cuenta porque no son más que el reflejo exacto de la vida en el plano físico. En cambio, durante la misma noche podemos tener más de un sueño con un contenido muy distinto.
Por ejemplo; podemos soñar que estamos sentados bajo un árbol frente a un paisaje lleno de verdor e iluminado por el sol, hay flores perfumadas de todos los colores, muy cerca de donde estamos sentados a la orilla de un riachuelo oímos el canto de los pájaros y el murmullo de las aguas que corren cuesta abajo.
En este instante sentiremos amor y una paz extraordinaria en nuestro interior. Este sueño es evidente que nos está revelando lo que somos por dentro, porque lo que podamos ver o sentir en los sueños, sea agradable o no, siempre es un reflejo de nosotros mismos.
Si durante el sueño sois conscientes de que estáis soñando y de que os habéis librado de las limitaciones del plano físico, significa que para vosotros existe continuidad entre el plano físico y el astral. Cuando lleguéis al discipulado aceptado, en este plano podéis desplazaros por el aire sin que os afecte la fuerza gravitatoria, ya que “allí” a disminuido notablemente. También podréis atravesar puertas y paredes sin necesidad de abrirlas, veréis en cuatro dimensiones y entraréis en contacto con seres desconocidos y devas de dicho plano, la pureza del color, la luz y el sonido no tienen comparación con lo que conocemos en el plano físico, siempre y cuando lógicamente, nos hayamos situado en el sub plano superior astral.
También la velocidad de desplazamiento aumenta a medida que ascendemos a los sub planos superiores, pues el concepto que nuestro cerebro físico tiene del tiempo y el espacio es el más lento y limitado de todos.
Estad atentos porque los sueños pueden ser muy reveladores, especialmente cuando servimos.

Marta Parramon Elies