Síntesis !

 

Al poner la atención en cualquier Centro de vida, nos estamos adentrando en el corazón de todo cuanto existe, interna y externamente, siendo este el objetivo que persigue toda vida manifestada que lleva a cabo su evolución en nuestro universo, tratando de liberarse consciente o inconscientemente de la presión de los opuestos.
Al nombrarlo nos viene a la imaginación un sin fin de puntos medios entre cualquier polaridad. ¿Pero qué significa para la evolución humana este estado de consciencia en que el logro del equilibrio produce liberación?
¡Síntesis es la Clave.! Para los seres humanos, Síntesis resume en una sola fracción el fruto de las experiencias adquiridas, que nos han permitido desarrollar la consciencia durante interminables encarnaciones y llegar a ser lo que somos en la actualidad. Sin embargo, antes de llegar a este estado del Ser en que se diluye la fricción entre los opuestos, primero hay que desechar lo inútil que todavía persiste en nuestro interior y extraer lo esencial de todo cuanto hemos acumulado en el tiempo. Cuando hayamos sintetizado al máximo habiendo desarrollado la mente discernidora y la discriminación a la par del corazón, la dualidad tal como la entendemos dejará de existir y el equilibrio se hará realidad, porque nos habremos situado por encima de los opuestos y en el centro de nosotros mismos.
El día que Síntesis forme parte de nuestras vidas, habremos iniciado la etapa final del Sendero dentro del reino humano, habiendo conquistado el Antakarana y la consciencia Egoica, entonces empezaremos a actuar como mónadas bajo la influencia del Reino superior planetario. El Sendero de Síntesis, nos da entrada al Centro místico de Shamballa, la Morada del Señor del Mundo, donde se elaboran cíclicamente los planes y proyectos a seguir para la evolución planetaria, cumpliéndose así el Propósito del Señor del Mundo tal como lo diseñó el Logos planetario cuando decidió hacerse cargo del planeta, lo cual nos da a entender que la trayectoria evolutiva a seguir está prevista de antemano y que el Logos conoce el fin desde el principio. Todo cuanto ha acontecido, acontece y acontecerá está escrito en un eterno presente, esperando que el ser humano despierte a una mayor visión interna y atraviese los velos que le impiden ver más allá de si mismo, entonces descubrirá que la individualidad a la que tan apegado ha estado durante el largo caminar evolutivo es una ilusión mental y que lo único verdadero y real es la Vida Una que lo incluye todo y lo sintetiza en la consciencia del Ser y del Realizar.

Aprender a sintetizar es un deber que se impone el mismo discípulo que se ha comprometido con su propia Alma y sabe de su responsabilidad y porque aspira a convertirse en un servidor de la Jerarquía Espiritual. No podemos penetrar en los Altos Lugares si no hemos aprendido a desechar lo inútil y a simplificar nuestras vidas. Para ello tendremos que disciplinar la mente, mantener firme la estabilidad emocional y profundizar en lo más hondo de nuestro ser, donde hallaremos aquel centro de paz y equilibrio donde los opuestos se reconcilian cuando el Amor incondicional y la Inteligencia se unifican con el propósito de llevar adelante la evolución planetaria. Para alcanzar la Paz, la Libertad, la Justicia y el Orden, no es suficiente con desarrollar la Inteligencia, También debemos haber despertado el Amor y la Compasión, porque sin Amor el ser humano se acaba autodestruyendo.
En el Corazón se halla la Vida y la capacidad de Crear, también el equilibrio, la libertad y el poder que nos da el saber situarnos en el centro de nosotros mismos. Es dentro del corazón donde hallaremos todas las respuestas trascendentes que nos formulemos, así como, La Mente superior es el instrumento que nos sirve de eslabón hacia el plano Búdico donde llegaremos a intuir que,. !La Simplicidad es el camino!
Sintetizar implica desprendimiento y renuncia de lo superfluo. Cuantos pensamientos vanos nos invaden la mente y cuantas palabras inútiles llenan nuestra boca. Con el tiempo y la evolución lo que ahora nos parece esencial dejará de serlo, porque al seguir sintetizando habremos extraído lo más esencial de lo Esencial. Al haber simplificado de tal forma nuestra vida ya no seremos humanos, por lo cual no habrá nada que sintetizar dentro del 4º reino, porque todo cuanto permanezca en nuestro interior estará representado por un único símbolo, una Nota armónica cuya vibración contendrá en potencia el poder creador y cuando esta Nota sea emitida, surgirá a la existencia un nuevo mundo.
La fuerza de Shamballa está penetrando visiblemente en el mundo trayendo como Mensajero la Fuerza del Destructor en todos los sectores del vivir humano. Shamballa no nos trae teorías que inmovilizan, trae un gran dinamismo, esperando que la aplicación práctica de lo que la Jerarquía de Maestros (Su Ashrama), ha estado enseñando a los discípulos durante siglos haya sido aplicada. No en vano desde hace algunas generaciones se empezó a difundir el Agni Yoga, el Yoga de Síntesis, el que lleva impreso el 1^.er Rayo que nos inclina a romper con todo lo establecido y nos revela que el tiempo no existe, que es tan solo un concepto mental creado por el ser humano y que nos conduce a vivir siempre fuera de tiempo. Agni Yoga nos pide vivir el !Aquí y Ahora! . Debemos aprender a dar respuesta a lo que llegue a nosotros a cada instante y no dejarlo para mañana, porque el mañana no existe, pues mañana volverá a ser hoy, y así jamás nos moveremos creyendo que estamos evolucionando, pero lo único que haremos será seguir viviendo de recuerdos del pasado o de esperanzas puestas en el futuro y el presente lo dejaremos arrinconado, a la par de nuestra evolución. Si deseamos contribuir a la evolución planetaria deberíamos empezar a quitarnos peso de encima, a sintetizar nuestras propias vidas, nuestros pensamientos, costumbres y creencias incluidas.

Síntesis nos muestra el camino que conduce a la liberación de la materia. El primer Rayo transmitido desde Shamballa ha de conducir a la humanidad al equilibrio, a la responsabilidad y a la práctica de los auténticos valores humanos, a la justicia y al orden. Cuando hayamos simplificado nuestras vidas y nos mostremos en nuestra verdadera esencia, cuando dejemos de hablar por hablar, cuando cada palabra sea útil y dicha con el fin de revelar su significado más auténtico pensando siempre en dar lo mejor de nosotros mismos, entonces al pensar poco y hablaremos menos, pero al menos, todo cuanto digamos tendrá un sentido y a la vez estaremos sirviendo al bien común al crear formas mentales bien construidas y positivas. Para que nazca la nueva consciencia se precisa una gran creatividad, la cual no es producto de la mente sino que surge del corazón cuando vivimos atentos el presente. Quienes respondan a estas poderosas energías serán los que construirán el aspecto más positivo de la civilización que está viniendo a la existencia en esta a esta nueva era, una civilización cuyas consciencias se desarrollaran con una comprensión superior de lo que significa el silencio y el poder de la palabra, la justicia, la libertad y la fraternidad.

Marta Parramon Elies