viernes, 23 de agosto de 2013

El Despertar Interior !


    


Qué representa para nosotros el Despertar ?

Quizás durante varias encarnaciones hemos estado acumulando conocimientos de todo orden 
que nos han permitido desarrollar la mente concreta y nos han preparado para poder subir un peldaño más en la escala evolutiva y para lo cual, quizás ya estamos preparados. 
Sin embargo, a partir de ahora deberemos dar cabida a un  nuevo conocimiento y a una mayor comprensión lo que significa ir más allá de lo estrictamente intelectual. 
Cuando desarrollemos la mente abstracta y dejemos de centrarnos en los efectos para adentrarnos en las causas, entonces se abrirá ante nuestra consciencia un nuevo camino y una nueva comprensión de la realidad, en el cual, la mente concreta no tiene cabida. 
Para que los conocimientos ocultos lleguen a formar parte de nuestra consciencia, será preciso cribar los conocimientos adquiridos y deshacernos de gran parte de la memoria acumulada y separar el grano de la paja, a fin de  únicamente quede lo esencial. 

Entonces, nos volvemos a preguntar,.  
¿ Qué es lo esencial para nosotros?
Cuando lo sepamos tendremos en nuestras manos unas semillas que, a su debido tiempo, deberemos plantar y cultivar con amor y esmero, y si lo hacemos con constancia llegará un momento en que darán sus frutos, aunque no deberíamos esperar resultados de nuestras acciones, pues la ley del karma nunca falla, y tarde o temprano, aunque no veamos los resultados en esta encarnación es bien seguro que se producirán. 
Si hacemos esta selección  ya no nos seguiremos dispersando en infinidad de conocimientos y distintas filosofías, porqué significará que nos hemos identificado con nuestra naturaleza interior y hemos descubierto una parte de nosotros mismos que desconocíamos.  
La etapa evolutiva actual nos da la oportunidad de dar un paso adelante muy importante. Lo podemos comprobar por nosotros mismos al vernos obligados a vivir a nivel personal y mundial, una experiencia kármica como jamás la ha vivido el ser humano desde su individualización.
No deberíamos temer al karma, puesto que cuando se precipita sobre el mundo significa que se nos está dando la oportunidad de rectificar y cambiar de orientación. De hacer las cosas pensando siempre en el bien de la totalidad y no únicamente en nosotros mismos o en nuestro reducido entorno familiar. Si estamos dispuestos a dar un paso adelante en nuestra evolución espiritual deberemos trascender el karma.   
I cabe resaltar que el karma no son únicamente los efectos de actitudes erróneas cometidas en el pasado, individuales o mundiales, sino que esta etapa planetaria también trae consigo todo lo bueno, lo bello y verdadero que la humanidad hemos creado a través del tiempo, aunque aparentemente nos parezca que únicamente existe el mal. 
Lo que ocurre es que todo cuando se relaciona con la vida del Espíritu se desarrolla en los niveles ocultos y progresa internamente. Esto significa que si no estamos muy atentos a la vida interna y externa, discernimos e investigamos sobre las causas ocultas que mueven la evolución, únicamente será evidente para nosotros lo superficial y aparente del aspecto material de la vida.  

Es preciso aprender a sintetizar!  
Nos hemos preguntado, ¿Qué significa la vida para nosotros internamente?  ¿qué creemos que significa el Despertar?.
Quizás nos hemos formulado estas u otras preguntas trascendentes intelectualmente pero, ¿somos realmente conscientes de su significado? 
El Despertar significa adquirir consciencia de nuestra divinidad, y de que nos estamos transformando en un ser de la misma esencia que nuestro Yo superior. Pero no se trata únicamente de retenerlo en la mente como un conocimiento intelectual sino como una vivencia real.

Los primeros pasos en el camino consisten en llegar a ser autoconscientes en cada plano, en el físico, en el astral y en el mental. Y a medida que a través de las experiencias adquiridas en infinidad de encarnaciones nuestra consciencia se expande y los tres cuerpos funcionen como una unidad, surgirá la personalidad integrada. 

A partir de aquí el Ángel solar proyectará un Rayo de Luz hacia la mente purificada del ser humano. Este rayo de luz es lo que conocemos esotéricamente como el Sendero o Antakarana, que nos conduce a nuestros orígenes divinos y a la unión consciente con nuestro Yo superior. En este proceso la mente concreta y la abstracta entran en contacto. 
De esta forma el Ángel puede acceder hasta la personalidad integrada del ser humano que ha redimido toda la substancia de sus cuerpos, y al mismo tiempo, el discípulo   identificado plenamente con su Yo superior, puede ascender hasta los niveles donde Éste tiene Su morada.
En esta etapa se desarrolla la intuición, la percepción superior de los mundos invisibles, y la consciencia individual adquirida en el pasado, queda relegada a un segundo término, diluyéndose y dando lugar a la consciencia grupal.  
El Yo superior no posee consciencia individual, por este motivo no puede manifestarse ni utilizar los vehículos de un ser humano, si éste no ha desarrollado la consciencia grupal y su orientación es hacia el servicio a la humanidad.
La naturaleza del Ángel es Solar y altruista.
La substancia de los cuerpos que utiliza el ser humano, es Lunar y egoísta.  

Cuando llegue el anhelado momento y el Antakarana se vaya construyendo, el cerebro registrará los contactos internos conscientemente y sabrá dar forma e interpretar aquello que es abstracto.  
En esta etapa el Antakarana revela en nuestro interior una avenida de Luz extraordinaria, es la luz de nuestra propia Alma divina fundida con el Amor y la Luz de nuestro Progenitor, el que nos ha guiado incansablemente durante millones de años, sacrificando su estado Nirvánico por Amor y Compasión, hasta conducirnos a su elevada condición de Maestro y liberarnos de la esclavitud de la materia.

¿Cuando nos hacemos preguntas, quien responde, el Yo superior o la personalidad?. ¿ Buscamos el conocimiento esotérico por el afán de saber, o por un impulso de compasión del Alma que no le importa sacrificarse porqué sabe que si las consciencias de los seres humanos despiertan, habrán emprendido el camino de la Liberación?.



Marta Parramon Elies                                                                        

miércoles, 14 de agosto de 2013

Muerte y Nacimiento ! 6ª y última parte parte


*CONCEPCIÓN Y NACIMIENTO*



En los anteriores artículos hemos hablado sobre el proceso de la muerte.
De la racapitulación hecha por el alma a medida que abandona sus cuerpos de expresión.
Del almacenamiento de la memoria o código genético humano en el cuerpo causal donde mora el Ángel solar. 
I de la estancia en el Deva-Kan.
En el presente artículo hablaremos finalmente del proceso de la Concepción y el Nacimiento.
                                        
Cuando la Mónada a través del Ángel solar decide volver a encarnar, la esfera devakánica que va languideciendo  empezará a producir ciertos acontecimientos que no se revelan porqué ocultan un gran misterio iniciático.
En este proceso el alma humana entra en un estado de ensoñación similar a lo vivido al desencarnar cuando se despojó del cuerpo etérico esperando entrar en el plano astral. Ahora sin embargo el proceso es de retorno y el alma es ajena por completo a lo que está ocurriendo.

Cuando es llegado el momento, el Ángel solar que había acogido en su cuerpo causal a los átomos permanentes físico, astral y mental del alma humana, invierte el proceso y los lanza a la manifestación conjuntamente con toda la información superior recogida en el átomo egoico. Viene a ser como un despertar de cada átomo, iniciándose de nuevo su vibración y atrayendo del espacio a ciertos Ángeles superiores especializados en activar el proceso de renacimiento. Su misión consiste en aplicar a cada uno de los cuerpos el karma que le corresponde al alma que va a encarnar. Le proporcionaran unos padres y familiares con los cuales estableció un vínculo kármico en su anterior encarnación, aunque esto no significa que les una un mismo parentesco. Normalmente se encarna en un mismo país y en un entorno social similar al anterior el cual estará ligado a su karma. 

Cada átomo permanente ejerce una potente vibración magnética hacia gran cantidad de jerarquías angélicas que se agruparán a su  alrededor para iniciar el proceso de construcción de los cuerpos que deberán contener a aquella alma.  
Unos Devas especializados en el cuerpo etérico se encargaran de su construcción a fin de permitir la afluencia de las energías que vitalizarán dicho cuerpo y le permitirán acceder desde éste a sus cuerpos sutiles y de éstos al físico denso. 

En realidad la vibración que emite cada átomo permanente es percibida por los Devas constructores de forma abstracta, viene a ser como formas geométricas, que simbolizan el arquetipo de la forma que deberán construir con todo lo que implica su contenido; el nivel vibratorio, la evolución de los nadis y de los chacras del ser que ha de encarnar.
El cuerpo etérico es el doble exacto, el molde sobre el cual los devas del plano físico densificarán los éteres hasta crear la forma densa, construyendo su complejo y maravilloso mecanismo orgánico, el sistema glandular, la corriente sanguínea y el sistema nervioso...

En el proceso de construcción intervienen los Devas de superior evolución a la elemental quienes dirigirán a los devas menores  en la construcción de cada uno de los cuerpos, éstos devas son de una categoría espiritual muy avanzada respecto a los constructores de los reinos subhumanos. Además existen los devas menores que constituyen los elementos, la substancia con la cual se construirán las formas.  

El Ángel solar tendrá prevista la posición astral de aquella alma que determinará el día y la hora de su nacimiento a fin de que pueda cumplirse su karma y disponga de las oportunidades de seguir avanzando. 
Una vez esté todo dispuesto se iniciará El gran Misterio de la Concepción.

La concepción es un acto sagrado y aunque los padres pudieran ser personas sin ningún sentido de la moral o incluso criminales, una concepción siempre es debida a la intención de Dios de manifestarse.

En el acto de la concepción el óvulo materno estará dispuesto para recibir el espermatozoide paterno que contendrá el átomo físico del hijo fecundado. 
Un Ángel especializado en el proceso de la concepción introducirá en el semen masculino uno o varios átomos permanentes si se da el caso, pues ya sabemos que una mujer puede gestar varios hijos a la vez.
Una concepción siempre la produce el espermatozoide que lleva el átomo permanente del alma que debe encarnar.

Una vez la concepción se haya realizado, el átomo permanente físico empezará a latir siguiendo los impulsos cíclicos del batir del corazón solar.
El átomo se transformará en el corazón de aquel cuerpo en formación donde se asentará la vida y los devas elementales iniciarán la construcción de todo el organismo físico denso, hasta que llegue el momento exacto fijado por el Ángel solar y los Señores del karma y la madre de a luz.

Los demás cuerpos serán construidos por los devas constructores de los distintos planos y la cualidad de los mismos será la que le corresponga a aquella alma. 
Según el nivel evolutivo alcanzado por el alma encarnada, desde la infancia puede manifestar sus emociones y una mente despierta o no, pero los devas los seguirán construyendo hasta su plenitud, invirtiendo el proceso a medida que envejezca y el proceso de destrucción sea iniciado hasta el momento de volver a abandonar su cuerpo físico. 

***

(*Daros cuenta que hemos recorrido todo el ciclo entero de muerte y nacimiento, del enorme trabajo dévico y la cantidad de entidades que intervienen en el proceso.                  Imaginad pues en lo que se está interfiriendo cuando se decide quitarse la vida y el porqué del karma tan grave que se genera*)


Marta Parramon

 

domingo, 4 de agosto de 2013

Muerte y Nacimiento ! 5ª parte




La experiencia que vivirá cada ser humano en el momento de la muerte física al penetrar en el cuerpo astral, (dejando al margen los casos de muerte repentina o de suicidio) puede ser muy distinta, depende del enfoque que su consciencia.
Al observar atentamente a la humanidad veremos que se distinguen tres grupos predominantes cuyos valores difieren ampliamente. 
Para los seres humanos muy primitivos cuya consciencia es instintiva, la muerte será simplemente un sueño, un olvido total, porqué su mente todavía no está lo suficientemente despierta como para haber dado a construir a los elementales sus vehículos astral. Esto significa que para ellos no existe recapitulación ni poseen Deva-chan. Para estos seres humanos la única atracción es hacia el plano físico, lo cual los lleva a encarnar inmediatamente después de la muerte.   

Aunque la causa no es la misma que el caso de las personas primitivas, existen seres humanos enfocados totalmente en sus intereses materialistas que han sido criminales y en su extremo egoísmo han causado gran sufrimiento a los demás. Cuando dejan el cuerpo físico quedan atados a la tierra, la atracción de sus deseos y los vínculos que ha establecido en su vida son tan potentes, que se sienten obligados a entrar de inmediato a una nueva encarnación.

Las personas corrientes de tendencia astral cuya consciencia es (kama-manásica) o sea que deseo y mente se entrmezclan en su forma de ser y de vivir, una vez han entrado en el plano astral después de descartar el cuerpo físico-etérico, para ellas la muerte es una continuación de lo que han deseado e les ha interesado más en su vida. En este plano su consciencia y la percepción de los sentidos astrales son los mismos. Se sienten bien en tal estado, no están solos y frecuentemente no se dan cuenta de que han atravesado las puertas de la muerte.

Daros cuenta que cada vez que descartamos un cuerpo los sentidos de aquel plano han dejado de ser perceptibles. Esto significa que en el plano astral ya no sentiremos ninguna apetencia física. 
Una vez hayamos entrado en el plano mental nos habremos desprendido totalmente de los vehículos de la personalidad y estaremos  preparados para entrar en el Deva-chan.

No le ocurre lo mismo al ser humano enfocado totalmente en sus intereses materialistas que ha sido un criminal  y en su extremo egoísmo ha causado gran sufrimiento a los demás. Este ser humano cuando deja el cuerpo físico denso queda atado a la tierra, porqué la atracción de sus deseos y los vínculos que ha establecido en la vida son tan intensos, que tan solo siente la necesidad de permanecer cerca del plano físico denso, tratando por todos los medios posibles de entrar nuevamente a la vida física. Este tipo de entidades humanas a menudo pueden poseer el cuerpo de personas inexpertas que experimentan en niveles astrales, de seres alcoholizados o devilmente atados a su cuerpo etérico. 

Existen otros casos en que el alma también queda atada a la tierra, pero el motivo es muy distinto. Se trata de las buenas personas altruistas y de buen corazón, que al morir pueden haber dejado a un hijo o a alguien querido desamparado o con quien les unía un gran amor. También pueden haber tenido algo urgente que realizar o un deber que no han podido cumplir.  

Sin embargo existen muchos seres humanos orientados al bien común y al servicio, como son los aspirantes espirituales  que al desencarnar entran de forma inmediata en un campo de servicio al que están muy acostumbrados, dándose cuenta enseguida que no es nuevo para ellos, pues en sus horas de sueño han sido instruidos en escuelas internas de la Jerarquía. A partir de ahora ya estarán activos en el servicio de forma permanente y no únicamente en unas breves horas de sueño.   

 Cuando la eliminación de los cuerpos se ha ido produciendo a su debido tiempo y es casi total, al alma humana le ha llegado el momento de establecer contacto con su Ángel solar. 
Mientras tanto el vehículo mental está en proceso de destruirse y entonces por un instante, se le permite al alma tener consciencia del futuro, a la inversa de la recapitulación hecha en el momento de morir. En este instante el pasado, el presente y el futuro se ven como un eterno presente. De esta forma entre una encarnación y otra se va desarrollando la continuidad de consciencia, el "Eterno Ahora" 
La visión que permite ver el futuro queda impresa en la consciencia. El hombre común no será consciente de la oportunidad que se le dará en su nueva encarnación, sin embargo el discípulo avanzado (si el karma que debe vivir se lo permite) se orientará hacia su destino de forma consciente desde una edad muy temprana.
 
El Deva-Chan se halla en el centro de dos grandes acontecimientos en la vida de la personalidad humana, uno de ellos es la muerte, el otro el nacimiento.
Pertenece al estado mental, siendo una creación de la imaginación del ser humano, donde puede realizar los sueños que la vida le negó en su vida karmica.
En realidad todo cuanto se vive en el Deva-chan es Maya.
No es una proyección del Ángel solar o Yo superior sino del ego humano, aunque lógicamente en este estado las vivencias son fruto de muy elevados estados de consciencia, de lo más puro y elevado de aquel ser.

Los aspirantes y algunos discípulos en probación generalmente desean llegar a vivir sus experiencias en el  Devachan después de haber realizado un arduo servicio en el plano físico, pero como hemos dicho anteriormente este es un deseo de la personalidad, por muy elevado que sea.
Quizás pensaremos que es una contradicción decir que antes de entrar en el Deva-chan el alma humana se desprende de todo cuanto atañe a su vida personal y sin embargo en el Deva-chan que situamos en niveles superiores, se realizan los deseos personales de aquella anterior encarnación...
Esto es fácil de entender cuando sabemos que el Ángel solar acoge en Su Manto de Luz todas las buenas acciones del alma encarnada. En cambio las acciones, deseos y pensamientos impuros y egoístas que han creado karma, han quedado almacenados en los átomos permanentes esperando la nueva encarnación para ser incorporados de nuevo en la consciencia del ser humano. 
 
Sin embargo existe una gran diferencia con la aspiración del discípulo que ha sido aceptado por el Maestro y es que en este estado el discípulo iniciado no aspira al Deva-chan sino al Nirvana. Algo totalmente impersonal cuya cualidad máxima es el Amor surgido del Corazón del Logos solar. 

Cuando el alma humana llega a este estado superior devakanico construye para si una esfera matizada por el color de su Rayo del Alma con la transparencia de sus deseos superiores y dentro de esta esfera realiza sus sueños. Según la intensidad en que los viva determinará el tiempo de permanencia en este estado.
A medida que se cumplan los sueños la esfera se irá extinguiendo y los Señores del Karma entraran en actividad para preparar el futuro nacimiento. 
Dentro de esta esfera empezará a producirse distintos e importantes hechos, entraran en actividad ciertas entidades superiores; la Mónada que es Quien otorga la Vida, el  Ángel solar que actúa de forma sincronizada con los Señores del Karma para ofrecerle al alma que acaba de salir del Deva-Chan un vehículo adecuado a su nueva encarnación e
intervendrán una gran cantidad de jerarquías angélicas y elementales en el proceso de construcción de los cuerpos. 

El Ángel solar reunirá la información contenida en los tres átomos permanentes, mental, astral y físico y los pondrá a disposición de los Devas superiores que dirigirán la construirán los tres vehículos y les serán necesarios al alma humana para continuar el proceso evolutivo, además de toda la información superior de aquella alma humana contenida en el cuerpo Causal.

*

( En el próximo artículo trataremos de la 

Concepción i el Nacimiento )


Marta Parramon

La Teosofía en la Nueva Era !