Los Ángeles Solares. !Los Hijos de la Mente!

 

¿Quiénes son Los Hijos de la Mente?.

Nos dice la Sabiduría Eterna que este es el misterio más profundo que subyace en nuestro sistema, al igual como lo es el misterio de la Electricidad vinculado con la vida del Logos solar tal como se manifiesta por medio de los siete Centros mayores, los Logos Planetarios u Hombres Celestiales, también descritos en la religión Católica como “Los Siete Espíritus ante el Trono de Dios”
Este misterio aunque fuera revelado no sería comprendido, porque el grado evolutivo alcanzado por la gran mayoría de la humanidad no le permite interpretar correctamente algo cuya magnitud está muy por encima de su mente concreta.
Al hablar sobre el misterio de la Electricidad, estamos intentando introducirnos en el conocimiento de Fohat, o Fuego Eléctrico que es el Fuego del Espíritu. A medida que profundicemos en el tema irá surgiendo la comprensión de que existe un estrecho vínculo entre la mente y Fohat, entre el poder del pensamiento y el fenómeno eléctrico, que en sí constituyen la presión de dos energías diferenciadas; el Fuego del Espíritu sobre el Fuego de la materia.
Esta enseñanza únicamente puede ser comprendida cuando se ha construido el Puente que une la mente superior con la inferior, entonces estaremos preparados para interpretar correctamente el significado oculto de lo que encierra tal misterio y nuestras vidas serán regidas por la Razón Pura y la Intuición. Cuando el aspecto inferior personal está siendo controlado por el Ser Causal, cuando el cuaternario humano se ha fusionado con la Triada Espiritual, (Atma, Budhi y Manas), los tres vehículos que utiliza la Mónada para manifestarse, entonces se le podrán revelar al ser humano los fundamentos de tal misterio, lo cual le permitirá colaborar conscientemente con la Jerarquía espiritual en la realización del Plan del Logos planetario, o sea, en la evolución planetaria.
El día en que dichas cualidades predominen en la consciencia humana, cuando asuman un lugar de suma importancia en el orden de las cosas y el ser humano dedique su vida al Servicio y manifieste la Voluntad al Bien, entonces merecerá tener en su poder la clave que le permitirá encontrar el método por medio del cual, impulsado por el Fuego Eléctrico de su mente superior, podrá desvelar los misterios que para él todavía permanecían ocultos. Entonces hallará la fuente de donde emana el impulso inicial que proviene del cosmos y entrará conscientemente en la Corriente y en las causas que promueven la evolución. Solo entonces se habrá convertido en un verdadero colaborador de Los Grandes Seres. Su individualidad habrá quedado relegada a un segundo término, por lo cual, ya no será controlado por la ley del Karma porque su orientación será hacia el Espíritu, entonces será él quien dirija y domine a las fuerzas elementales de sus cuerpos convertido en un creador consciente.
Si nosotros como grupo hemos podido acceder a estas enseñanzas, es porque estamos preparados para iniciar su investigación y empezar a poner a la práctica la comprensión adquirida.
Como bien sabéis, la aplicación de la ley hermética de Analogía nos abre la consciencia a la intuición, este es el método esotérico más fidedigno para llegar a la comprensión de lo superior y tal como a menudo lo hemos podido comprobar grupalmente, cuando es bien aplicada hallamos el hilo de conexión que une lo grande con lo pequeño, lo superior con lo inferior.
¿Porqué a los Ángeles solares se los denomina Los Hijos de la Mente?
Para ello tendremos que retroceder al gran acontecimiento planetario de la Individualización, para darnos cuenta de que es a partir de la implantación de la mente que aparece en la Tierra el 4º reino, el que al paso de muchos miles de años llegará a convertirse plenamente en Humano.
Cada reino de la Naturaleza es la “Madre” del reino superior, pues todos los reinos se gestan en el inmediato inferior. En su proceso evolutivo el reino humano no puede ser considerado como tal hasta haber desarrollado la mente, ya que mientras no ha llegado a esta condición todavía mantiene en su ser la consciencia instintiva del reino animal. Hasta que con el desarrollo de la consciencia, que es mente, llega a un punto en su trayectoria evolutiva en que aunque de forma inconsciente, empieza a sentirse atraído hacia su Yo superior. Es a partir de aquí que la dualidad se hace presente en su vida, no es enteramente humana ni enteramente divina, sino la manifestación de ambos aspectos que luchan entre sí. Al paso de muchas experiencias generadoras de consciencia, de fracasos y aciertos y habiendo escogido en cada bifurcación el camino correcto y la renuncia de lo personal, empieza a gestarse un miembro más del Quinto Reino.
Si a los Ángeles solares se los denomina, Los Hijos de la Mente, es porque en un pasado remoto fueron humanos, aunque no necesariamente desarrollaron su evolución en la Tierra. Se dice que antes de producirse la individualización el Logos planetario invocó a Venus, Su Alter Ego, a fin de que le ayudara a pasar las pruebas iniciáticas a que estaba siendo sometido. Ved de nuevo la analogía con el ser humano... Llegado a cierta etapa evolutiva, el Logos planetario estaba en proceso de despertar un nuevo Chacra dentro de Su Cuerpo manifestado,.. la Tierra). La Iniciación se da cuando el iniciado demuestra haber elevado de forma definitiva las energías de un chacra inferior a su octava superior. Sin embargo, el factor predominante y trascendente lo constituye la aplicación del Cetro de Poder sobre el Centro superior que debe ser despertado a una mayor y más elevada actividad, justo en el momento de recibir la Iniciación y el Reconocimiento de los Grandes Seres, produciendo con sus ígneas Energías un fuerte impulso evolutivo y la activación de una elevada frecuencia vibratoria del chacra en cuestión, produciendo el despertar de la consciencia del Iniciado a una nueva dimensión dentro de su ser, intensificando su poder y capacidad de comprensión de los misterios ocultos y de sí mismo.
En el proceso de Individualización del reino animal, la energías del Cetro de Poder fueron impuestas al Centro Laríngeo del Logos planetario, el cual como ya sabéis, corresponde al reino Humano. Al propio tiempo el Logos Solar (dentro de cuyo Cuerpo la Tierra es un chacra menor,) percibió su demanda y decidió convocar a un numeroso grupo de Ángeles Solares especializados en la Individualización, a fin de que descendieran de su elevada morada a los mundos de la materia más densa y dieran origen al Cuarto Reino de la Naturaleza. Un grupo de ellos accedió, aunque otros no aceptaron someterse a tal sacrificio porque tenían que abandonar Su Nirvana, el mismo Centro del Corazón Solar.
Fueron los Devas solares que accedieron a la petición del Logos los que implantaron la semilla de la Mente a los animales que en aquella época lejana habían rebasado los subplanos superiores de su reino. Este estado de conciencia animal (chacra) estaba emitiendo una nota, una vibración superior que impulsó al Logos planetario a emitir una invocación (aunque inconsciente) en demanda de Luz, ya que como reino, aquel grupo de animales avanzados habían alcanzado su más alto nivel y precisaban de un nuevo Arquetipo para seguir evolucionando.
Al igual que un padre que engendra a su hijo, los Ángeles solares fecundaron la mente instintiva del animal avanzado. Nosotros sabemos que la semilla lleva dentro de sí el ADN de su género y especie, pero para que una semilla pueda llegar a desarrollarse deberá ser sembrada en tierra fértil, se la tendrá que proteger de los elementos y que no le falten los nutrientes ni el agua, el aire y la luz necesarios para germinar y poder crecer.
La semilla, (el alma humana o consciencia) se desarrolla en el seno de la Madre Tierra, a oscuras y aprisionada. Sin embargo, al germinar, su tendencia es a crecer en vertical, hasta que rompe la barrera que separa la oscuridad de la Luz. A partir de entonces y sabiendo que la mente es sinónimo de Fuego que irradia Luz, se desarrollará de forma creciente asemejándose cada vez más a su Progenitor.
Ha tenido que pasar las pruebas del Fuego por Fricción en la oscuridad de la materia. Una vez ha entrado en contacto con la luz y el calor, es sometido al Fuego Solar o al Fuego del Alma que extrae de su interior sus cualidades, entonces el proceso de crecimiento en vertical se acelera buscando la Luz . Llegados a la etapa final dentro del reino humano, el Fuego de Fohat o del Espíritu entra en acción, entonces el vegetal empieza a florecer y a dar sus frutos. El ser humano ha alcanzado su plenitud, se ha convertido en su Arquetipo y la luz de la mente superior resplandece en toda su gloria. La semilla ha dado sus frutos y la consciencia alcanzada revela a un nuevo Ser Causal.
Todo este proceso evolutivo, que va de la mente instintiva a la mente abstracta, ha convertido al animal en una Alma liberada, pero para ello, ha tenido que pasar por el reino humano. Ahora va en camino de convertirse en un Ángel y al igual que Prometeo, seguirá el camino de sacrificio de su Progenitor por amor y compasión hacia la humanidad infantil que precisa salir de la oscuridad y penetrar en la Luz, contribuyendo de esta forma a redimir la materia y a liberar a la humanidad de la prisión y la esclavitud a que es sometida mientras evoluciona en el 4º reino.
Es importante ser conscientes de que somos el Puente de unión entre el Espíritu y la materia, que tenemos la responsabilidad de redimir a las vidas elementales de nuestros cuerpos, elevarlas a niveles superiores y liberarlas de su propio reino al igual que lo hizo con nosotros nuestro Ángel solar.
Los Ángeles solares que nos acompañan en el transcurso de nuestra existencia dentro del reino humano, son en verdad nuestros !Primeros y últimos Maestros!. No fueron ellos quienes individualizaron al reino animal sino que fue otro grupo de Ángeles solares.

Marta Parramon Elies