Traducción del Catalán al Español publicado en audio en el blog de la Sociedad Teosófica Rama Armonía el 28/9/2014
Reunión grupal en la Asociación de Amigos de la India de Barcelona, Catalunya (España) año 2000
Este grupo que formamos nosotros es uno más de entre muchos que se entrenan por medio del estudio y la meditación con la finalidad de convertirnos en auténticos servidores de la Humanidad.
Aunque pertenezcamos a distintos rayos todos los grupos estamos unidos por un mismo propósito "contribuir a llevar a cabo el Plan" o sea, la evolución planetaria. Cada grupo cumplirá el servicio en el sector que le corresponda por línea de rayo, ya sea en la política, en la educación, en la filosofía, en la economía, en el arte, la ciencia, la religión, en la medicina etc... Al observar al mundo agudizad la sensibilidad interna y reconoceréis a los aspirantes y discípulos por su entrega al servicio demostrado hacia el bien común.
La consciencia grupal es la característica del Alma, así como la consciencia individual es la que posee la personalidad de la humanidad común.
Al entrar en un grupo al principio precisamos de una orientación que generalmente nos llega por medio de los libros, aunque de forma muy especial e importante por la relación grupal que establecemos y la práctica de la meditación. Desde el momento en que nos comprometemos con el grupo y por poca preparación interna que poseamos, compartimos la radiación grupal, nuestra aura se va haciendo magnética y cuanto más avancemos más atracción generaremos en nuestro entorno, a la vez que empezaremos a irradiar.
Si formamos parte del grupo no es por casualidad, es porqué nos estamos preparando para iniciar un servicio.Tened presente que cuando un grupo empieza a irradiar, en cualquier momento puede llegar a nosotros alguien que, (guiado por su alma) esté pasando por unas circunstancias críticas en su vida. Es precisamente en estos momentos difíciles cuando se producen en el interior, una serie de reacciones que remueven fuertemente la consciencia. Primero; sentimos un gran rechazo en contra de nuestro destino negándonos a aceptar lo quese nos ha impuesto. Posteriormente intentamos negociaro con quienes creemos que son la causa de tal crisis , ya sea con las personas, las circunstancias o con Dios mismo, a fin de recuperar lo perdido y el estado de seguridad y bienestar anterior. Hasta que finalmente no tenemos otro remedio que aceptarlo, no se trata de resignarse, sino de haber llegado a la comprensión de que todo cuanto ocurre en nuestras vidas tiene una razón de ser y nos trae un mensaje que debemos saber descifrar. Interpretar tal mensaje es nuestra próxima meta. Es a partir de aquí cuando alcanzamos la paz y estamos preparados para responder al llamado del Alma, y por primera vez empiezan a surgir de nuestro interior preguntas que jamás nos habíamos planteado antes, tales como; ¿qué sentido tiene la vida?, ¿porqué el ser humano es violento por naturaleza?, ¿porqué he nacido y porqué tengo que morir? y tantas otras preguntas que vienen a nuestra mente cuando el Alma empieza a hacer sentir Su Voz en nuestro interior.
Quizás hasta aquel momento hemos cultivado en exceso los valores materiales en detrimento de los valores espirituales y verdaderamente humanos. Esto no significa que seamos malas personas, pero cuando el egoísmo de la materia ha llegado a un extremo, corremos el peligro de quedar presos en el Sendero de la izquierda, pues por más que podamos satisfacernos personalmente y no carezcamos de nada material, aún sintiéndonos insatisfechos seguimos obcecados buscando esta felicidad en lo efímero, sin haber alcanzado la felicidad que tanto anelamos, lo cual crea un inmenso vacío en nuestro interior que las cosas materiales no pueden llenar. Llegados a este punto crítico, es cuando interviene con fuerza aquel estado que conocemos como, "dualidad". Dos aspectos de primordial importancia generados en el interior de todo ser humano que se ven enfrentados. El Alma, nuestra verdadera esencia, que nos señala el camino hacia la liberación de las ataduras de la materia y el aspecto negativo del Morador, el que nos ha mantenido hasta ahora presos del egoismo y la oscuridad de los valores materiales. Nos hallamos de frente ante dos caminos opuestos, (que algún dia llegarán a complementarse) y debemos escoger uno de ellos, y aunque no es la norma, algunas almas se pierden o quedan rezagadas debido al fuerte apego material y por miedo a enfrentar un Camino de total inseguridad todavía no hollado y que ellos mismos habrán de construir con su altruismo y responsabilidad. Es entonces cuando en lo más profundo del sufrimiento que podamos experimentar que empezamos a plantearnos la vida desde otra perspectiva, a buscar la paz tan necesaria y la felicidad en otra dirección invirtiendo los valores que hasta el momento nos habian conducido a momentos ilusorios de una felicidad pasajera, dejando a su paso un rastro de frustración e infelicidad.
Si somos buenas personas que deseamos contribuir al bien común, ya seamos esotéricos o religiosos, quizás pensaremos que si el Logos o Dios es Amor, ¿porqué no nos libera de la ignorancia, del caos y de la desdicha que hace sufrir tanto a la humanidad?. La humanidad debemos despertar de la ignorancia y empezar a valernos por nosotros mismos. Mientras esperemos que sea Dios, los Ángeles u otros seres quienes resuelvan los problemas mundiales, vamos herrados. Somos Almas adultas y ahora en vez de pedir debemos ofrecemos para dar, este es indicio de un cambio trascendental en el interior del ser humano. ¿Rezamos o meditamos para atraer de nuestro Yo superior las respuestas que nos guien y podamos ver con claridad la forma de como podemos contribuir a que el mundo cambie?
Esta pregunta es de primordial importancia porqué indica la tendencia del Alma al Servicio.
Cuando estamos preparados ya no pensamos constantemente en nosotros mismos y en nuestra desdicha, entonces es cuando podemos empezar a servir. Al observar al mundo o a alguien en particular que sufre y se acerca a nosotros pidiendo ayuda lo primero que sentiremos será compasión, y la Compasión es la más grande expresión de Amor.
Cuando nos convertimos en servidores la oportunidad de servir se presenta ante nosotros de muy diversas maneras, pero algo muy importante es no olvidar que estamos actuando como almas y que nuestra consciencia es grupal y que allí vamos nosotros, allí está el grupo.
En cada servicio prestado aunque sea en solitario, siempre deberíamos tener presente que la radiación del grupo es nuestra radiación y la nuestra es la de ellos y que el servicio grupal siempre es mucho más efectivo cuando actuamos como almas.
Si alguien que busca respuestas a sus inquietudes espirituales entra por primera vez en el grupo y nos pregunta, ¿que sentido tiene la vida? a lo mejor ni nosotros mismos nos lo hemos planteado y entonces no sabremos que contestar, quizás le recomendaremos un libro y si estamos más o menos preparados a lo mejor encontraremos una palabra o un párrafo con el cual se identifique, pero cuando es alguien que va desorientado y viene a pedirnos ayuda, no podemos desentendernos y pensar que el libro le dará la respuesta, además esto indica falta de amor y confianza en la fuerza y el poder que nos da el Alma grupal.
La forma de iniciar una conversación con alguien que empieza, es abriendo el corazón, procurando enfocar la cuestión de forma psicológica y al propio tiempo hiendo a lo interno. A quien viene pidiendo ayuda puede haberle ocurrido algo muy doloroso y ante todo debemos ser compasivos, pues en el servicio, el Amor y la Inteligencia deben ir por delante, sea cual sea el nivel de consciencia que los demás posean, tanto si el problema es físico, emocional como metal.
Un requisito importante que debería cumplir todo servidor que forma parte de un grupo esotérico, consiste en conocerse a si mismo, si quiere comprender sin distorsión alguna la necesidad de los demás. Nuestro grupo, aquí en Amigos de la India está abierto al público y dedicado al estudio y meditación esotéricos para principiantes. Quien lo desee puede adherirse a él si siente una demanda interna o simplemente le atrae el esoterismo. Si lo ha conducido su alma se integrará en el grupo y si no es así, dejará de acudir a las meditaciones y no lo volveremos a ver.
Sin embargo en el plano físico también existen grupos esotéricos cerrados al público, cuya existencia tan sólo es conocida por sus miembros, los cuales realizan servicios que van mucho más allá de la que realizan los aprendices. Estos generalmente están formados por discípulos en probación y aceptados y algún iniciado que es quien coordina al grupo y hace de canal de las energías que fluyen al grupo desde el ashrama interno y del Maestro.
El hecho de recordar o no las enseñanzas internas que se dan en el ashrama es casi siempre debido al karma generado en vidas anteriores o por otras razones que conoce su Alma y el Maestro. Seguramente muchos de nosotros en un remoto pasado fuimos fanáticos practicantes de los dogmas de fe que imponía la iglesia, llegando a los extremos en la práctica del celibato, el ayuno e incluso la flagelación. Las consecuencias de estas represiones crearon graves neurosis, afectando al cerebro y al resto del organismo provocando desviaciones sexuales de todo orden y que hoy en día como bien sabemos están saliendo a la luz.
No se puede ir en contra de la naturaleza, todo tiene su medida y debemos mantener el equilibrio si queremos tener un cuerpo saludable, que en definitiva es el instrumento que ha de ser utilizado por el Alma.
El karma generado en el pasado debido a ciertas creencias religiosas o no, al consumo de drogas o ciertos medicamentos utilizados para tratar enfermedades mentales, pueden afectar al cuerpo etérico en la zona del cerebro, no permitiendo retener las vivencias internas ni los sueños. Con la evolución nuestras necesidades físicas y emocionales van perdiendo fuerza al introducirse en la consciencia la vida del Alma, pero no porqué sean reprimidas, sino porqué en nuestra consciencia han cambiado las prioridades y al elevar las energías de los chacras inferiores a los superiores las necesidades físicas y emocionales disminuyen grandemente y no tienen el poder sobre nuestra consciencia como lo tuvieron en el pasado.
Marta Parramon Elies
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