La Sociedad Teosófica fué fundada en Nueva York el 17 de noviembre de 1875, incorporada a Madrás ( India ) el 3 de abril de 1915. Sus tres objetivos son: 1º, Formar un núcleo de Fraternidat Universal de la Humanidad sin distinción de raza, sexo, doctrina, casta o color. 2º, Fomentar el estudio comparado de les religiones, filosofias i ciencias. 3º, Investigar las leyes inexplicables de la naturaleza y los poderes latentes en el hombre.
viernes, 31 de julio de 2015
Filosofía esotérica ! 2ª parte
domingo, 26 de julio de 2015
Filosofía esotérica ! 1ª parte
(Traducción del Catalán al Español publicada en audio en este blog el 19/1/2014 )
Conferencia
a cargo de Marta Parraron
en
la Biblioteca Arús
de
Barcelona, Catalunya
(España)
13/10/2011
Querer
describir con palabras aquello que no tiene forma no es tarea fácil
porque
las
palabras tan solo
son
formas que ocultan la realidad interna.
Para
comprender el valor oculto de las cosas tendremos que ser muy
observadores de las formas de la Naturaleza, aunque no únicamente de
las formas físicas,
sino
también del mundo de los pensamientos y los deseos.
Cuando
hablamos de lo oculto estamos tratando de describir los aspectos
internos de la Creación de los cuales todavía no somos conscientes.
Las formas físicas, emocionales y mentales pertenecen a la materia,
incluso un perfume, un color, una nota musical que no tienen forma,
pero
que,
sin embargo,
son
perceptibles a nuestros sentidos físicos, siguen siendo formas.
Se
trata de llegar a ser conscientes de que detrás de las formas de
todos los reinos existe una Vida. Una Vida que lo compenetra todo e
impulsa la evolución en todo el sistema.
Al
hablar del alma generalmente lo hacemos en sentido de propiedad,
decimos mi alma o tu alma. En realidad,
el
Alma es Una y en el proceso de encarnar en las formas se divide a sí
misma
en infinidad de chispas de fuego, que al igual que semillas, son
introducidas en la mente instintiva del hombre-animal para producir
la individualización.
Al
paso de largo tiempo estas semillas germinarán e irán manifestando
su propia naturaleza al desarrollar el principio mental.
Cada
una de estas chispas penetra en una forma, que el Alma utilizará a
fin de llegar a ser plenamente consciente en la vida de los tres
mundos, el aspecto más denso y más concreto de la creación.
Al
hablar del espíritu y la materia,
nuestra
mente concreta está dividiendo lo indivisible y aunque la evolución
se desenvuelve en la dualidad,
deberíamos
recordar lo que H.P. Blavatsky
decía:
"La
materia es Espíritu en su nivel más sutil y elevado y el Espíritu
es materia en su manifestación más densa y concreta", por lo
cual, únicamente existe la Unidad,
manifestándose
en una infinita diversidad de formas y en distintas frecuencias
vibratorias.
Durante
el largo caminar evolutivo,
el
ser humano ha creado infinidad de formas en sus distintos niveles de
consciencia. Una civilización, una cultura y todo cuanto se
desarrolle en ella es obra del ser humano. Entonces podemos afirmar
que la analogía puede ser aplicada entre el Creador y el hombre,
pues así como el Logos crea a Su imagen y semejanza, el ser humano
en su propio nivel hace lo mismo, pues siendo nosotros una de Sus
creaciones, somos dioses en potencia, aunque en general,
inconscientes.
Cuando
el ser humano ha desarrollado la mente concreta a niveles avanzados y
tiene la capacidad de visualizar correctamente la forma mental que ha
proyectado al espacio, con el tiempo los devas constructores lo
llegarán a concretar; sin embargo,
detrás
de cualquier forma siempre habrá la entidad angélica que la ha
construido y la vivifica, siendo su vibración idéntica al nivel de
consciencia del ser que la ha creado
con
el pensamiento.
Al
introducirnos en lo oculto no podemos dejar de investigar sobre el
Propósito del Creador, un propósito que está muy por encima y más
allá del Plan evolutivo que los grandes Maestros llevan a cabo por
medio de Sus discípulos.
El
Logos decide manifestarse a través de las formas a fin de llegar a
ser plenamente consciente de Su creación, desde los planos más
sutiles hasta los más densos, naciendo la Consciencia al producir la
fusión entre Espíritu y materia.
Cuando
nuestra mente se enfoca en la cualidad que ocultan las formas y no en
la apariencia, se está introduciendo en lo oculto. El contacto con
el Alma o Yo superior, que puede experimentar de vez en cuando el
aspirante espiritual, le produce un relámpago de intuición y en
este instante su mente superior se ilumina, revelándole algo de lo
cual hasta aquel instante no era consciente, En el plano de la
intuición no existen las formas, aunque la mente concreta intentará
darle forma para comprender su significado.
Cuando
hablamos de las causas internas, estamos hablando de los niveles del
alma. Si somos impersonales significa que estamos practicando el
olvido de nosotros mismos, no en el sentido de rechazar y reprimir la
naturaleza física, emocional o mental, no se trata de esto, se trata
de cultivar los valores superiores, pensar y actuar en términos de
humanidad y no permitir que el egoísmo marque la pauta de nuestras
vidas.
Cuando
un ser humano siente el Amor, no únicamente por sus familiares y
personas queridas, sino que surge de su corazón como algo natural y
espontáneo, entonces sabe que el Amor está en todo, lo es todo, él
es Amor y al mismo tiempo está dentro y fuera de sí mismo. El Amor
no es un sentimiento, es un estado del Ser que lo incluye todo y, sin
embargo, no retiene nada.
Una
vez se ha llegado a este estado de consciencia significa que el Alma
ha tomado posesión de sus vehículos y a partir de entonces servirá
desinteresadamente al Plan del Creador, a su Maestro y a la
Jerarquía.
En
estos momentos de grandes crisis mundiales la mayoría de seres
humanos tan solo percibe la oscuridad y esto es debido a que
únicamente se ve la forma, los efectos de unas causas internas.
Sin
embargo, existen en el mundo muchos grupos de discípulos y
aspirantes que están sirviendo al Propósito de los Maestros,
tratando de materializar el Plan del Señor del Mundo, pudiendo ser
aplicada aquella frase de;
!
Hacer
descender el Cielo a la Tierra!.
¿Nos
hemos preguntado alguna vez la causa de tantas cosas cotidianas, que
por ser tan evidentes nos pasan desapercibidas?.
Existen
dos preguntas que sería interesante formularse y que son de gran
trascendencia, porque atañen a todo ser viviente: ¿el porqué de la
vida? Y el porqué de la muerte?
¿Quién
soy yo realmente? Si yo no soy estos cuerpos que tan solo son
formas, si estos vehículos que utilizo no son la causa real,
entonces ¿Quién soy yo?.
Cuando
vivimos épocas de oscuridad, de pruebas que nos hacen sufrir, nos
parece que hemos retrocedido en el camino que nos estaba conduciendo
a la luz. Sin embargo, esta oscuridad es aparente, es una oscuridad
de la personalidad, ya que el Alma no tiene conflictos. Llega una
etapa en que el Alma necesita que la vibración de sus vehículos
aumente en intensidad, pero para que se produzca deberán ser
liberadas gran cantidad de células y átomos de vibración inferior,
estas células están impregnadas de los estados de consciencia del
individuo que mantienen una parte de nuestro ser en la oscuridad y no
nos permiten manifestarnos plenamente como almas.
Cuando
logramos salir de la crisis vuelve la Luz a nuestra consciencia y
quizás con un nuevo y mayor resplandor, pues las crisis nos han
abierto la consciencia a una comprensión superior y la oscuridad ha
sido substituida por células de luz procedentes del plano búdico.
De esta forma, la radiación y la Luz aumentan significativamente
porque nuestra consciencia se ha expandido. En las etapas en que a
nuestra personalidad le parece estar en un pozo sin salida, - aunque
no seamos conscientes de ello, - el alma sigue recibiendo enseñanzas
en las aulas internas y la consciencia sigue progresando en sentido
ascendente.
Cuando
ocurre una desgracia a un amigo o a cierto sector de la humanidad, es
natural que lo compadezcamos, aunque seguramente no nos afectará
gravemente. Pero en el momento en que pensamos: si esto ocurriera a
mis hijos o a cualquier otro ser querido, sería terrible
verdad?).
En
estos momentos nos damos cuenta de que cuando nos ponemos en el lugar
de los demás somos más capaces de comprender el sufrimiento de la
humanidad, porque sentimos el dolor del mundo como propio. Entonces
empezamos a sentirnos más integrados con el género humano y en
nuestra consciencia superior surge la comprensión de la existencia
de los lazos que siempre nos han unido a ella. Todos sufrimos, todos
amamos, todos tenemos ilusiones y buscamos la felicidad, aunque
también podemos ser crueles en ciertas circunstancias.
Formamos
parte de una unidad que es la Humanidad, somos el reino de la
Naturaleza que se ha individualizado para desarrollar la mente. Pero
por si sola, cuando el amor no se ha desarrollado a la par, la mente
es egoísta y en vez de unir separa. Separados, lo estamos
externamente como personalidades, pero internamente formamos una sola
unidad.
Estamos
intentando ver la realidad, las causas de las cosas, lo interno y es
en estas causas que los grupos orientados al servicio, las
organizaciones humanitarias o los seres humanos individualmente
tienen puesta su consciencia, con la finalidad de servir a una causa
justa y en despertar las consciencias que todavía están
adormecidas.
Cuando
se forman grupos el servicio es mucho más efectivo que si se presta
individualmente. Cada uno de nosotros lleva su propia lamparilla para
iluminar el camino,
sin embargo,
cuando
se unen muchas lamparillas se crea un gran resplandor. Simbólicamente
ésta
es
la Luz del Alma grupal
cuya
potencia atrae la atención del Maestro y la utiliza como canal de
energías superiores que habrán de preparar al mundo para la
Reaparición de Cristo.
jueves, 23 de julio de 2015
miércoles, 22 de julio de 2015
sábado, 18 de julio de 2015
jueves, 16 de julio de 2015
Consciencia y existencia !
Para comprender que significa la consciencia, como se desarrolla y cual es el proceso que nos conduce a la perfección debemos irnos al principio de los tiempos cuando el hombre animal fue individualizado por el Ángel solar, nombrados así porqué surgieron del Corazón del Sol.
Los Ángeles solares pertenecen a uno de los tres grupos de Agnis Wattas, también conocidos esotéricamente como Los Señores del Fuego los cuales en un sistema solar anterior llegaron al máximo desenvolvimiento de la Inteligencia habiéndose convertido en Grandes Adeptos, en los Seres más avanzados de dicho sistema. Al descender del Corazón del Logos sacrificaron su propia evolución por Amor y Compasión hacia la humanidad infantil para dotarla de consciencia. Además Havía una razón fundamental para tal acontecimiento. Ellos descendieron hasta el plano manásico para servir al Propósito del Logos planetario, que consistió en crear un nuevo reino de la naturaleza que hiciera de puente de unión entre los reinos sub humanos y el reino de las Almas, pues por aquel entonces materia y Espíritu no estaban conectados aquí en la tierra y porqué la evolución alcanzada de nuestro Logos solar demandaba el desarrollo de la Consciencia. Así que los ángeles solares, a una octava superior, también se comprometieron a hacer de intermediarios o "Prometeos" entre el Espíritu y la materia, permitiendo a las Mónadas humanas ser conscientes de la materia en su mayor densidad con el fin de redimirla.
Hasta entonces no havía existido ningún intermediario y los reinos superiores estaban desligados de los reinos estrictamente elementales; el animal, el vegetal y el mineral.
En el proceso de individualización el Ángel solar proyectó un rayo de luz sobre aquellos seres primitivos, engendrando en sus mentes instintivas la semilla de la Mente que a lo largo de milenios los convertiría en seres autoconscientes. Esta semilla llevaba en sí misma el "Código genético" del Ángel, nuestro Progenitor y Arquetipo. Imaginemos pues lo que esto sugnifica y cual es el destino final que nos espera a los seres humanos.
Este Rayo de luz o Mente, fue una proyección de la Mónada espiritual que se ancló en el corazón del Ángel solar, siendo Su Divino Intermediario y en este contacto, el Rayo de luz se dividió en dos, uno de ellos fué dirigido por el Ángel hacia el corazón del individuo infundiéndole la Vida del Espíritu y el otro lo ancló en la cabeza dotándolo de Consciencia.
Este rayo de luz es "el cordón umbilical" a través del cual el Ángel solar nos alimenta el alma y nos mantiene unidos a Él hasta habernos liberado.
Quizás nos hemos planteado alguna vez esta pregunta...
¿Cómo es posible que los Ángeles solares cuya categoría espiritual es igual o superior a la de un gran Adepto, pusieran Su atención en nuestro planeta y en un reino cuya evolución espiritual era prácticamente nula?
Para poder comprender algo de los motivos que indujeron a un acontecimiento tan trascendente como fue la individualización, tenemos que aplicar la analogía y proyectar nuestra imaginación intuitiva hacia el Logos solar e intentar ver la correspondencia que existe entre el proceso evolutivo macro y el microcósmico.
Todo el Sistema solar en conjunto, los planetas sagrados y los no sagrados como la Tierra, estamos viviendo una etapa de gran trascendencia evolutiva.
¿Qué le ocurre al discípulo que se prepara para pasar las pruebas previas a la iniciación?. Veamos la analogía con el Logos.
Toda entidad evolucionante en este Sistema solar emite ocultamente un sonido, una vibración que es captada únicamente por los Grandes Seres como una nota. Cuando se ha llegado a una etapa avanzada en el camino, la nota emitida suena a una octava superior, cambia el tono, el ritmo, la vibración y el compás. Mientras el ser humano está orientado hacia la materia su nota es discordante, atrayendo únicamente la atención de los devas elementales. Pero cuando el discípulo se ha armonizado y ha estabilizado su vibración, cuando demuestra que su centro cardíaco está plenamente despierto, atrae la atención del Maestro y entonces es aceptado y preparado para recibir la iniciación.
Ocultamente el sonido emitido es una invocación al Alma en demanda de Luz. La respuesta siempre llega cuando el discípulo demuestra su amor y entrega desinteresada en el servicio hacia la humanidad.
La venida de los Ángeles solares fue debida a la invocación del Logos planetario al producirse en Él en una gran expansión de consciencia que elevó su estado vibratorio, llamando la atención de Su Alter Ego, Venus, produciéndose un contacto consciente y la consiguiente respuesta.
Cuando el ser humano llega a ser plenamente consciente de ser una Alma en encarnación y se reconoce como el descendiente del Ser espiritual que nos ha guiado y protegido en el largo caminar por este mundo, entonces despierta en él la plena consciencia de ser parte del Alma Una. Es un proceso de identificación con el Alma del Mundo y con todos los seres que formamos parte de ella.
No es la mente concreta e intelectual la que nos permite re-conocernos con nuestro Yo superior, es por medio de la intuición que brota del corazón a medida que nos acercamos a la 2ª iniciación.
Los centros mayores o Chacras dentro del cuerpo del Logos planetario que son de primordial importancia en esta etapa evolutiva y están tremendamente activos son estos tres reinos de la Naturaleza...
lunes, 13 de julio de 2015
domingo, 5 de julio de 2015
viernes, 3 de julio de 2015
El reino dévico, los números y la astrología esotérica !
Al instruir en matemáticas a sus discípulos, Pitágoras decía..."Los números Impares son divinos y los pares son terrenos" dando a entender que los primeros representaban al aspecto espiritual, mientras que los segundos correspondían a la materia. La dualidad inherente en este universo.
Si
tomamos esta teoría como referencia y utilizamos la ley hermética
de analogía, podemos hallar correspondencias muy interesantes que
nos permitirán enlazar ciertos hechos o enseñanzas con las cuales,
hasta el momento, no les habíamos hallado ninguna conexión.
Cada
etapa evolutiva en la vida del ser humano, que puede abarcar muchas
encarnaciones y el espacio de tiempo que separa una iniciación de
otra, está fuertemente influido por una energía de Rayo
determinada. Esto es importante saberlo porque además nos puede
orientar en el propio autoconocimiento y en el de la humanidad en
conjunto si conocemos la forma como cada energía de rayo afecta a
las distintas etapas evolutivas.
1º
- A la humanidad común y a los seres humanos que han entrado en el
Sendero de Retorno y han recibido la 1ª iniciación menor, los rige
el 7º Rayo. Lo cual les facilita la experiencia, el desarrollo y la
consciencia de todo cuanto se relaciona con el aspecto físico y más
material de la existencia.
2º
– Posteriormente hasta llegar a la 2ª Iniciación, al aspirante al
discipulado le regirá el 6º Rayo, potenciando en él, el desarrollo
y control del deseo y de su vida astral.
3º
- A los discípulos aceptados y a partir de la 3ª Iniciación, les
regirá el 5º Rayo y activará grandemente el desarrollo de la mente
concreta y científica.
4º
- Desde la 3ª a la 4ª Iniciación y hasta llegar al Adeptado, las
experiencias que deberá vivir el Arhad, si es que está encarnado,
traerán impresa la energía del 4º Rayo, siendo plenamente
consciente de su estado búdico.
La
mente, en su totalidad, habrá sido completamente trascendida y
relegada al pasado, habiendo renunciado a su individualidad y
liberado al Ángel solar.
5º
- Finalmente, al recibir a 5ª Iniciación, (la máxima que podemos
recibir los seres humanos en esta cuarta ronda) regirá el 3.er Rayo,
el cual sintetizará en sí mismo a los rayos inferiores,
respondiendo por completo a su Mónada espiritual y habiendo
convertido
al Arhad en un Maestro de Compasión y Sabiduría.
¿Quizás
os preguntaréis como es posible que un iniciado de 3.er grado esté
regido en esta etapa por la mente concreta, cuando ha desarrollado
por completo la intuición.? Es necesario que sea así, porque la
misión de un iniciado consiste en hacer prácticas las enseñanzas
espirituales por medio de una mente científica. Aunque los estados
de consciencia adquiridos anteriormente no los perderá jamás.
En
esta etapa evolutiva el iniciado vive una gran soledad e
incomprensión de
su entorno,
incluso por parte de los
compañeros
de grupo que todavía no han alcanzado su nivel interno, pues ellos,
aunque sean discípulos consagrados al servicio, todavía siguen
apegados a las enseñanzas espirituales del pasado, interpretándolas
desde una perspectiva devocional. En cambio, para el iniciado, las
tendencias devocionales religiosas, filosóficas o esotéricas, son
comprendidas desde una perspectiva muy distinta, abriéndosele una
comprensión insospechada de la realidad a la que se le ha permitido
acceder, produciendo en él una gran revelación que le produce
momentáneamente la crisis de consciencia que conocemos como; . “La
noche oscura del Alma”.
Hay
que llegar a ser un iniciado y estar muy preparado, espiritual y
físicamente para poder asimilar las energías que derraman sobre él
las grandes Verdades y Misterios que el Maestro le revela sobre el
verdadero significado y la finalidad de la evolución en la totalidad
del planeta.
Siguiendo
con la numerología y las energías de Rayo, pondremos un ejemplo
para hallar las correspondencias y su relación con el Todo
universal. Podemos empezar con el n.º 5, el cual ejerce una
importancia capital en la evolución del reino humano, cuya
consciencia se desarrolla por medio de la mente, el 5º
Principio.
Luego
tenemos la figura geométrica del Arquetipo humano, que es
la estrella de
5 puntas, o pentágono, siendo la misión del Ángel solar
atraer
al ser humano hacia el 5º Reino de las Almas liberadas por medio del
5º Rayo que rige la mente
concreta,
hasta que el hombre empieza a responder a la mente superior
abstracta.
¡Si
os atrae la Geometría, yo os aconsejaría que meditéis sobre el
significado oculto de las 12 figuras poliédricas conocidas como.,!
Los 12 sólidos Platónicos! y
se abrirá en vuestra consciencia una comprensión insospechada sobre
la información oculta que encierran los números, las
figuras geométricas y la relación que existe con las demás
dimensiones del espacio.
En
esto vemos la importancia del desarrollo de la mente en toda su
extensión y profundidad. Entonces es comprensible que el número de
la evolución humana sea el 5, aunque el de su perfección es el 10.
Así como el reino dévico desarrolla su evolución bajo la
influencia del 6º Rayo, siendo su meta de perfección el número
12.
Hemos
repetido en varias ocasiones algo que no tendríamos que olvidar si
queremos introducirnos en el conocimiento sobre el reino dévico...
El hombre se desarrolla utilizando la Mente y el deva lo hace en el
Sentimiento.
El
reino angélico es el aspecto materia de la creación, mientras que
el reino humano representa el aspecto espíritu. Masculino-femenino,
positivo-negativo y todas las dualidades que podamos encontrar serán
necesarias para llevar a cabo el desarrollo de la consciencia y todas
estarán estrechamente conectadas por vibración numérica
similar.
Durante
el tiempo que pueda ser necesario para el desarrollo de ambos reinos,
el deva, a medida que avance, irá desarrollando la mente humana.
Mientras que el hombre, a la vez que
la
mente, desarrollará la sensibilidad dévica. De esta manera se irá
produciendo la unificación de las consciencias entre ambos reinos,
llegando a una etapa evolutiva muy avanzada en que se fusionarán,
hasta tal punto, que se fundirán en un único Ser, el Andrógino,
mitad Hombre y mitad Ángel.
Si
el hombre en su perfección es el 10 y el ángel es el 12, vemos que
para que nazca el ser Andrógino, debe producirse el contacto y la
íntima fusión entre los dos reinos y para ello será necesario
llenar este vacío central que numéricamente los separa, a fin de
que haga de puente de unión entre uno y otro, (entre espíritu, el
hombre) y (la materia el ángel) y este es el n.º 11. La suma de los
dos Rayos que los rigen mientras actúan como dualidad, .
El
dévico 6+ humano 5= 11
Si
sumamos los números de ambos
reinos
en su total evolución y perfección, 12+10+11 = haciendo la
reducción numérica, nos da el 6, el número de la Creación, la
estrella de 6 puntas o hexágono, el Espíritu descendiendo a la
materia entrelazada en un Proceso Creador.
Ved
que todo está bien atado. De la unión del deva constructor, el 6
con el pensamiento creador del hombre, el 5, o de un Logos, surge la
Creación.
En
el zodíaco el 11 corresponde al signo de Acuario, siendo su regente
exotérico el planeta Urano, el cual es la representación del Uno
manifestando dos aspectos de sí mismo, lo positivo y lo negativo,
Urano es espíritu manifestado en la materia. Su radiación es
electromagnética, por lo cual Urano se considera Hermafrodita.
El
11 es el número del Iniciado, dando la suma 1+1 = 2 que corresponde
al 2º plano monádico, el nivel de consciencia al cual ha accedido
el iniciado.
Es
el 2º Rayo de Amor Sabiduría el que rige nuestro Universo, el que
está activo actualmente en nuestro Sistema y al Alma de nuestro
Logos planetario.
A
la vez, Urano es el regente Jerárquico de Aries, al cual el ser
humano no responde a su influencia monádica hasta haber recibido la
3ª iniciación. Aries es el primero de los signos del zodiaco,! El
que inicia! Siendo Urano en este sentido, el Iniciador, el
Hierofante.
Vemos
pues que la influencia del 7º Rayo que nos viene a través de Urano
tiene su regencia en tres signos que señalan tres estados de
consciencia en que se desarrolla el reino humano; la del aspirante,
del discípulo y el iniciado. Como regente personal rige en Acuario.
Como regente esotérico o del Alma que rige a Libra y como Jerárquico
a Aries.
Siempre
que Urano se manifiesta con fuerza como en la etapa actual, además
de introducir la energía del 7º Rayo, hace de canal del 1º, Rayo,
el Destructor. Al comenzar una nueva era, las formas que no vibran en
la misma frecuencia deben ser substituidas y a la vez, el 7º rayo
que rige los éteres, introducirá en el aura planetaria las energías
(devas constructores) con las cuales serán construidas las formas
por medio de las cuales se llevará a cabo la creación de una nueva
civilización.
Estamos
tratando del 7º Rayo cuya importancia es primordial en esta etapa
evolutiva, por ser el más grande de los Constructores de formas
dentro del septenario de energías en nuestro Sistema y porque además
nos ha tocado vivir en una época de gran trascendencia espiritual,
Logoica y planetaria y humana.
La
astrología es la Ciencia de las energías y sabiendo que los Devas
son la Energía y que estamos tratando de 12 constelaciones
zodiacales, podemos asegurar que la Astrología esotérica es
esencialmente Dévica y que todo cuanto se vincule con el n.º 12
está unido al reino dévico.
Lo
vemos también en los doce pétalos del corazón.
Cuando
a las doce del medio día el Sol está en su cenit, justo en el
instante en que sus rayos caen perpendicularmente sobre la Tierra y
las sombras desaparecen, esotérica y visiblemente. Es el símbolo
del triunfo de la Luz sobre las sombras, una Luz que desciende al ser
humano desde su Ángel solar en el momento cumbre de su evolución.
Las sombras siempre representan el aspecto materia inferior e
involutivo.
Otra
relación con el n.º 12 es con Neptuno, regente de Piscis,
estrechamente unido al reino dévico, porque además de regir la casa
12 y ser el doceavo signo del zodiaco, por medio de él entra la
energía del 6º rayo, el número que corresponde a la evolución
dévica, además de la influencia que ejerce Júpiter sobre Piscis y
sus ciclos de 12 años.
Con
estas reflexiones, quizás algo complicadas, he tratado de dar
algunas pautas que quizás para quienes no estéis familiarizados con
el tema os cueste de entrar en él o no le encontréis sentido; sin
embargo, estoy segura de que si poseéis algo de
conocimiento sobre
el significado de los números y si
tenéis
las ansias de investigar en lo oculto, encontraréis muchas otras
correspondencias que os pueden despertar la intuición y os ayudarán
a ampliar la comprensión, porque hallaréis la conexión que existe
entre lo interno y lo externo, lo pequeño y lo grande y la respuesta
a muchos interrogantes todavía ocultos para la mayoría de la
humanidad.
La
astrología se fundamenta en los símbolos y saberlos, interpretar y
relacionar con los números, nos puede conectar con el reino angélico
en alguno de los tres niveles de consciencia: exotérica, esotérica
o jerárquica, aunque esta última comunicación ya no es tan fácil
de obtener porque únicamente pueden establecerla los iniciados.
Cada
una de estas correspondencias puede servirnos como un
"pensamiento
simiente"
y si estamos dispuestos a reflexionar sobre su significado más
profundo, se nos abrirá la visión a una nueva perspectiva más
amplia y de mayor significado. Cuantas más correspondencias
hallemos, nuestra mente
más
sintetizará, hasta que llegará un día que habremos hallado la
conexión con el Todo y un solo símbolo contendrá todas las
respuestas.